Había
una vez un dragón que no dejaba de decir mentiras. Una vez su maestra le digo
que no podía venir a la escuela porque decía muchas mentiras. El pobre dragón
engañon engaño a su mama diciéndole: Mama hoy en la escuela me he portado muy
bien. Y su madre le creyó. El dragón engañon cada día iba a una cueva y dormía
todo el día. Un día su madre fue a la escuela y le pregunto a su maestra
como es que no estaba su hijo. Cuando su madre se entero que no había ido a la
escuela tramo un plan. Pasaron las horas y cuando llego el dragón engañon a
casa su madre le dijo que estaba castigado por no ir a la escuela. Dos semanas después
le dijeron que estaba expulsado de la escuela dos semanas. El dragón
engañon fue a casa y le dijo su madre que tenía fiebre durante dos semanas.
Pasaron las dos semanas y dragón engañon otra vez fue a la escuela. En el
colegio su madre le estaba esperando y le castigo dos semanas de campamento. Porque
a dragón engañon no le gustan nada estar sin su mama. Cuando pasaron los dos meses
dragón engañon se convirtió en el dragón bueno. Y nunca más engaño a
nadie. Cuento contado ya se ha acabado.
Aida
Masot 3/06/14
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